Cuatro huellas de oso fueron descubiertos en un magnífico viñedo de las zonas más elevadas del Bierzo, cuatro factores que son imprescindible para alcanzar la excelencia: Selección de tierra, cuidado de la vid, clima idóneo y esmero en la elaboración.
Un rosado muy fresco y contundente en su fruta, tonalidades rojo rosado que recuerdan a las chuches, delicado en nariz con buena dosis floral -violetas- y rosas secas que viven en sintonía con su esencia, las frutas rojas. En boca resulta fresco y amargo en su final, con ligerísimo deje salino en su final, fresca acidez.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.