El nombre engaña mucho porque aunque es cierto que es ostería lo verdaderamente característico es que es un chino-fusión. Roc y Cris pasan todos los años (ex-covid) varios meses en Shanghai y otras partes de China descubriendo y redescubriendo cómo tratar el producto local del Valle con la manera de cocinar china.

El resultado es una delicia. Por ejemplo, unos calçots en salsa especiada de soja que son de escándalo. O la tripa de cerdo a la manera cantonesa. El menú de degustación amplio no es barato (90 euros si no mal recuerdo) pero estamos hablando de una verdadera experiencia gastronómica.

El restaurante no es muy grande: apenas seis o siete mesas, aunque tiene una terraza muy agradable para el verano, al borde del Garona. Y la casita es típica aranesa: madera y rústica.

Yo he vivido en Pekín seis años y conozco bien la cocina asiática. Y puedo decir que me da pena pensar que la gente que come en Roc & Cris no sabe lo auténtico y excepcionalmente bueno que es su producto en comparación con lo que se podría encontrar en la propia China. Y con el añadido del producto local.

Está en Aubert (no estrictamente en Valle de Arán ya que es el primer pueblo pasado Vielha hacia Francia).

Por cierto, además de buenos restauradores Cris y Roc son buenos "escuchadores". La primera vez que fui pregunté si ofrecían descorche y preguntaron "qué era eso". Se lo expliqué y me dijeron que no. Al par de horas me llamaron y dijeron "hemos pensado que es una buena idea, así que a partir de ahora puedes traerte la botella que quieras". Y desde entonces pago mis 8 euros (creo recordar) y me llevo uno de mis vinitos.