Como final de un estupendo fin de semana en CDQ, decidimos conocer esta nueva oferta que tanto despliegue informativo está teniendo.
A media semana reservamos para el Sábado, pero estaba completo para el servicio de comida y cena, pudimos reservar para el domingo a mediodía. El local se encuentra en la riera de Cadaqués, no es la mejor ubicación, más que nada porque no está en ese inigualable frente marítimo, pero está muy céntrico y al lado del aparcamiento principal, eso si, en cuanto pasas la puerta, se aprecia un jardín y una casa típica de pueblo muy acogedora y con una excelente decoración que conserva lo tradicional del lugar, predominando el blanco y el azul Cadaqués y los acabados rústicos de madera y piedra, realmente muy acogedor y un jardín/terraza exterior que presumo estupendo si se habilita para las cenas de verano.
El local cuenta con 3 comedores de tamaño mediano/pequeño, uno en el acceso desde el jardín y 2 más en el interior, a derecha e izquierda de la recepción, más la citada terraza de cara al verano, la cocina queda en medio, no es a la vista, pero si te paseas o vas dirección a los servicios, ves el clásico movimiento de una cocina muy activa.
Mucho personal, mucho y muy joven, tanto en cocina como en sala, servicio extremadamente amable y cercano, que en segundos te hacen sentir cómodo.
En cuanto a la comida, carta bastante completa y platos muy normales . . . . pero con algo, no se exactamente, supongo que cada uno tendrá su opinión. Está estructurada en entrantes, platos más consistentes, digamos que principales y postres, vaya como cualquier carta y te avisan está pensada toda para compartir, o no, ahí cada cual.
Esta primera vez nos decantamos por los entrantes, que permiten probar varios platos y dejar los platos principales para otra vez.
De entrada te ofrecen un aperitivo, gentileza de la casa, de pan de gamba con polvo de algas o algo así, acompañado de un bellini visión particular, pero bueno, el pan de gamba de mejor textura y sabor que apariencia.
De platos tomamos, pan con tomate muy bueno, jamón Joselito ( bueno, nada que comentar, Gloria que es muy clásica ). Anchoas trufadas con una salsa adicional, buenas. Ostras frías con una vinagreta, realmente buenas. Salmón marinado con su vinagreta y algo más, bien. Buñuelos de bacalao con espuma de miel, los buñuelos buenos, quizás con exceso de ajo para mi gusto, pero la espumita de miel, tremenda, hay que tomar una buena cucharada, generosa, y apreciar ese punto cortito pero de intenso sabor a miel, que tan bien contrasta con el salado del buñuelo. Langostinos y espárragos verdes en tempura, otro plato sencillo pero de intenso sabor y punto, que no sabes si están mejor los langostinos o el espárrago. De postre una crema catalana con fresas, muy suave y fina. Todo lo indicado fue a compartir.
En cuanto a la bebida, un Perafita picapoll de la tierra. Carta de vino, no muy amplia pero bien, tienen una cerveza muy conocida, tamaño familiar, que les subvenciona la vestimenta del personal y supongo que algo más, no voy a opinar sobre esto.
Buen café y un digestivo para terminar la comida.
Habrá que volver y probar los platos principales, 3 tipos de arroces, triunfaba el bogavante sensa feina (sin trabajo) que pedía mucha gente, buen pescado en diferentes presentaciones y buena carne. Destacar la buena presentación apreciada en todos los platos.
Lugar recomendable, de buena RCP para la oferta y el buen servicio ofrecido, oferta que extraña ver por Cadaqués, pero que seguro tendrá su público, ya que la apuesta e inversión es importante. El domingo estaba Eduard Xatruch que salió a saludar y preguntar por la comida, supongo se irán turnando y habrá presencia de los xefs/propietarios, al menos de momento.