Nuestra falta de previsión conllevó que pudiésemos comer en la zona del bar y de milagro. Por ello solo haré comentario de las copas de vino que eran adecuadas y de la carta de vinos que fue la mejor del viaje en cuanto a cantidad y calidad. Opciones nacionales (variadas) e internacionales. Muy Buenos precios. Elegí un pezas da portela 2012 a 21 euros.

Ensalada "de aquí" que era naranja, bacalao ahumado, ajo y pimentón (los ingredientes funcionan bien juntos).
Riles con samfaina (riñoncitos de cordero con pimiento y cebolla, un vicio, muy finos).
Venado estofado (generosa ración, sabrosa y tierna).
Presa Ibérica (buen género y punto de la carne, también muy generosa).
Sin postre. Cafe, pan y agua. Total 32 pax.

En los soportales de la plaza de la villa de Jerte, con excelente bodega, reseñada en la guia michelin con racimo rojo y bib gourmand, el restaurante tiene una decoración muy calida y tradicional, familiar, la carta tiene mas de 600 referencias al día a un buen precio, actualizadas las añadas y a una buena temperatura, y con tienda para llevar. Amables, profesionales, buen montaje con buenas copas y mantelería. vajilla muy cuidada, y las materias prima de mucha calidad, falta un poco de mejor presentación de los platos, pero esta compensado con el sabor de los mismo, precios ajustado para la calidad que tienen,es recomendable y se puede uno desviar, merece la pena.
Yo tomé una Tostada de Pan de Castaña con bacalao y espárragos rabiacanes silvestres arropado con Jamon dehesa de Extremadura, y despues Cochinillo Ibérico asado, Tarta de Cerezas, Vino de la casa, Xentia Tinto de Pago de La Encomienda de Tierra de Extremadura, excelente vino.