Excelente restaurante situado en la preciosa comarca de la Garrotxa donde
Excelente restaurante situado en la preciosa comarca de la Garrotxa donde los Pirineos hacen su magnífica transición entre el mediterráneo y la alta montaña. Rodeado de encinares, robledales y pinares y con preciosas masías.
El interior es elegántemente rústico, con poca luz en el salón pero buena en las mesas. Mesas muy amplias y separadas entre sí. Lugar muy cómodo. Al sentarte te reciben con un más que correcto cava rosado.
La comida se basa en interpretaciones modernas y muy bien presentadas de la cocina de mercado catalana. Excelente.
La carta de vinos es muy completa aunque tenemos la pega de no contar con añadas. Muy buen sumiller que perfectamente aconseja y da opciones. Precio del vino algo subido, aunque podemos encontrar alguna joya. Con añadas en la carta mi nota sería un 5. Copas excepcionales.
Gran carta de tes y cafés que se consumen en un saloncito encantador aparte del salón.