Restaurante Santa Cruz en Valencia
Restaurante Santa Cruz
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:

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Precio desde:
60,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
89 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
6.2
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
5.2
Comida COMIDA
7.8
Precio medio entorno ENTORNO
5.5
RCP CALIDAD-PRECIO
6.3
Gazpacho Marinero
Opiniones de Santa Cruz
OPINIONES
17

Buenos días,

estuvimos el pasado día 2 de septiembre a comer. Éramos dos personas y nos dejamos aconsejar por el dueño del local al respecto de las cantidades y aquello que tenía fuera de carta. Todo el marisco que tiene es muy fresco y de muy buena calidad, además tratan muy bien el producto en la cocina.

Los precios no son desorbitados y la relación calidad-precio es muy aceptable.

Un local que en su momento hacía cola para reservar y que ahora, con prácticamente la misma calidad de producto, no consigue llenar el 50% de los comensales a diario. Cosas de la crisis.

Cinco para comer, mesa redonda, todos conocedores del local,; pasamos de carta de comidas y vamos a lo planificado y todo compartido:
. anchoas, de buen tamaño y calidad con base de tomate, con su pan tostado con aceite y perejil.
. bandeja de marisco con cigalas, gamba de Denia, langostinos, camarones de buen tamaño. En esta ocasión no hubo percebes por cuestiones de la mar nos comentaron.
. plancha con una gamba y cigala por persona
. fideuá x 2
. all i pebre de calamar y langostino x 3: magnífico de sabor y rematado por unos huevos fritos para el último empujón del caldo medio sobrante.

Postres que elegimos de forma individual pero probamos todos,a destacar el flan de galleta y el tiramisú. De la fruta lo esperado dulcecita y fresquita.

Para beber y de forma continuada:
. Dominio de Tares godello 2015 con su paso por barrica lo hace más interesante
. Tantum Ergo rosado: un clásico nuestro y de la casa. Un espumoso que acompaña bien ese contundente all i pebre.

Unos buenos cafés finales y algún orujo completaron la reunión.

Local a medio gas una vez pasada la semana fallera, con mucha comida de empresa.

Mesa redonda para los cinco con unas cervezas y agua con gas y unos cacaos y almendras algo blandas.

La carta de vinos es corta aunque hay algo de todo. Empezamos con Tantum ergo chardonnay, seguimos con Belondrade Lurton 2015 y acabamos con unas copas de Viña Pomal crianza 2013. El servicio de la primera copa y autoservicio posterior, sin más.

Para comer, venimos con ideas claras:
. bandeja de marisco hervido: buen producto y buena ración. Bien hervido, pero servido demasiado frío (casi helado). Integrado por:
Gamba roja de buen tamaño, sabrosa.
Cigala por persona de buen tamaño pero algo blanda de textura, quizás demasiado hervida o hervida hace de masiado tiempo.
Camarones de tamaño extra y buena textura y sabor
Langostinos atigrados que no suelen ser el rey del sabor, pero buena calidad.
Percebes de tamaño pequeño y correcto sabor.
. bandeja con un par de gambas ralladas por persona, bien de plancha, buen sabor y tamaño. Un lujo.
. gazpacho marinero: extraordinario de sabor y textura; servido casi caldoso y humeante, lo suficiente para esperar unos minutos y que se hiciera meloso; muy buen fondo, pocos rtropezones, perfecta la pasta. No sobró ni media cuchara.
. una pescadilla de playa levemente rebozada y frita y servida en rodajss con pimientos de Padrón. Muy bien.

Postre: renunciamos a la propuesta consabida de bandejita de dulce que no suele aportar lo mejor y tomamos individual con tarta de queso, flan de galleta, helado de chocolate y dos raciones de fruta. Bien sin destacar.

Cafés y alguna copa de PX de Néctar más un orujo, dando tiempo a una larga sobremesa sin prisas, que es de agradecer.
Sigue siendo un referente en marisco en Valencia.

Aunque los meses sin R son tradicionalmente meses que no se "recomiendan" para los mariscos, la realidad es que es una comida propia de meses calurosos con un buen vino blanco y fuera de grandes guisos.
Si de marisco hablas en Valencia, este local tiene trienios en calidad de producto. A precio de calidad de producto.

Comida para 4, tras las cervezas iniciales, en mi caso una Alhambra especial más amarga e intensa que las anteriores versiones.
Al centro:
. Quisquilla: muy sabrosa, punto de cocción mínimo, jugosa, buen tamaño, buena ración. Excelente comienzo.
. Percebes (elegimos tibios) de tamaño extra, buena ración, cocción mínima, sabor intenso. Superior.
. Calamar plancha, con su tinta, troceado, bien de sabor pero nada especial.
. Gamba roja (2 x p.p.) cocida, tamaño medio. Como siempre cocción perfecta de punto, cabezas rebosantes. Muy bien.
. Gamba roja (2 x p) plancha, tamaño algo mayor, sin excesos que sequen las piezas, cabezas de gran sabor y jugos; cuerpos jugosos y sabrosos. Superior.

Principal:
. arroz meloso de gamba y sepia: algo menos que meloso, buena cocción de arroz, tropezones ajustados, ración para completar menú.

Postre:
. variado de fruta al centro: melón, sandía, cerezas, piña, kiwi. Gran momento para la fruta.

Apartado líquido (cervezas iniciales aparte):
. empezamos con un godello con barrica Dominio De Tares 2014: perfecto para esta comida.
. en el arroz pasamos al pinot noir con burbujas de Hispano Suiza: Tantum Ergo 2012.
. buenos cafés y el ofrecimiento final unos chupitos generosos de Don PX 2008.

No hubo pan, ni aceite, y el coste es según referencia.
El local a menos del 50% y mejora en la calidad y amabilidad del servicio (no porque fuera mala) así como en el trato del vino servido. Ventajas de la no saturación de años anteriores.
¿Precio elevado? Para una comida, sí; pero ahora vas y lo compras en esa calidad...

Comida para dos con algún hueco en las mesas, habiendo desaparecido aquel agobio de sillas y mesas casi imposible de cuadrar para conseguir dar de comer a la demanda que había.

De entrada agua fresca que aun aprieta el calor. Directamente al vino blanco y frio: Impromptu 2013 hubo que enfriar más y desde luego servirlo, salvo la primera copa que ni tan siquiera esperó el resultado de darlo a catar.

Aquí lo importante es el marisco, así que bandeja de marisco hervido. Esta vez las raciones son menores y hay que extender el material en la bandeja para que no se vean huecos. Contado por persona: dos buenas y jugosas gambas de Denia, muy buen punto de hervido manteniéndose muy jugosas; dos cigalas de tamaño bueno también en su punto perfecto, carnosas, bien llenas; dos langostinos pequeños y algo secos; buen camarón en mayor cantidad y de extraordinaria calidad. No hubo relleno de percebes o algo complementario como antaño. Al menos la calidad no ha bajado.

De segundo arroz del senyoret. No tuvimos suerte en la elección (quizás la fideuá o el suquet mejor) pues aunque bien planteado, servido en paella de poca altura estaba pasado de fuego y con demasiado horneado final con lo que se había secado y quemado algo el fondo. Lástima porque apuntaba bien.

Para postres y todos caseros hay muchas opciones de tartas siendo muy recomendable el bavarois de naranja.
Un par de cafés y algo de agua (Vichy y Solan de Cabres) sin extras ofrecidos como antes.

Un local referente en marisco del que parece que necesitas tu dosis anual (al menos).

Cena para 4 en este local de referencia en calidad de marisco (a precio acorde) y en el que practicamente sin carta, vas a por marisco hervido y plancha para rematar con alguna de las varias opciones que propone de arroz, gazpacho marinero o un pescado.

Local ya descrito y lo que antes era imposible de encontrar mesa, ahora estaba a menos del 50% de ocupación.

Entramos con un blanco, Atrium y unas cervezas para una corta espera ya que la bandeja de "hervidito para cenar" como la llaman lleva buena cantidad y calidad de gamba roja (extraordinaria de sabor y de buen tamaño), cigalas de tamaño más bien grandes y jugosas (poco hervidas), langostinos carnosos, quisquillas muy buenas, algunos percebes para poner nota de color (negro) entre tanto color rojo.
Semejante género se acompañó de Moet Brut Imperial

A continuación 2 (por persona) hermosas y muy sabrosas gambas rojas hechas a la plancha a las que solo les sobraba una cosa: sal. Llevaba demasiada sal que habia que separar y rascar para que no se comiera el sabor de tan buen producto.

Un poco de melva aceptable y unas anchoas, mejores, hicieron tiempo mientras los pescados (pescadilla y lenguados) llegaban acompañados de algunos trigueros, judias verdes y tomate hechos en plancha y añadidos sin más al plato. Nueva botella de Moet que como la anterior se limitó al descorche y primer servicio.

De postre una degustación de tarta de chocolate y sobre todo fruta pelada; un par de cafes, sin copas, aunque con chupitos de orujos.

Esta vez no me tocaba pagar a mí. Menos mal. Aún me dió tiempo de llegar a casa y ver los últimos momentos de la final de Topchef y nueva alegría al cuerpo.

En primer lugar disculpas por la tardanza en colgar el comentario pero allá va.
Comida de empresa donde decidimos tirar el resto, no se muy bien si esto es así para olvidar 2009 o para empezar 2010 con buen sabor de boca.
Nos dejamos aconsejar y empezamos con una fuente de marisco hervido ... gamba, cigala, langostino, quisquilla, percebe... todo ello exquisito (el percebe siendo bueno no estaba a la altura) con un punto de sal y cocción excelentes. Seguimos con gamba rayada a la plancha que como Jesulín sólo podemos definir con dos palabras IM-PRESIONANTE. Ahora bien, por consenso se aprueba repetir de gamba hervida para confirmar que estamos en una de las mejores marisquerías de Valencia.
Mientras esperamos que lleguen los segundos pedimos unas anchoas con melba que no desmerecen de lo anterior, aunque aun recordamos la gamba y la cigala.
De guisos fideúa de fideo fino, gazpacho de pescado y all i pebre (poco trabado para mi gusto). Algún comensal valiente se atreve con unos huevos fritos para mezclar con el caldo. Otros empezamos a estar llenos pero no renunciamos al postre y en este punto el restaurante pincha. Sacan al centro un helado industrial para compartir y la explicación que dan es ... "yo tengo que vender todo lo que está en la carta". Lo devolvemos a chiqueros y nos sacan un flan casero de naranja que está realmente bueno. Terminamos con cafés y "maltas" (Glenn Fidich, Glenn Rothes, etc.)
Respecto al servicio de vino decir que la carta es corta pero tiene un poco de todo (blancos gallegos, rueda....; tintos de Ribera, Rioja y Valencia .... espumosos de España y de Francia). Con los precios no se pasan mucho aunque el servicio se limita a descorchar y dar a probar. Tomamos un chardonnay de Enrique Mendoza y Finca Terrerazo en un decantador con hielo incorporado que hace que el tinto no pierda temperatura mientras se consume.
En cuanto al servicio de mesa algo atropellado pero con mucha simpatía y cambio de platos y cubiertos constante. El local pequeño y aglomerado, quizás sería un punto a mejorar junto con todo el menaje que es muy batallero para el precio cobrado.
Como conclusión podemos decir que estamos ante un producto de calidad excepcional, con un servicio agradable y un precio alto pero justo.

Lo bueno de una marisquería es que tengan rotación, y aquí la tienen porque siempre está lleno. Nos premiamos con 6 cigalas, 6 gambas de Denia, unas quisquillas, percebes; esta vez todo cocido, y luego 4 ostras, todo buenísimo.
Luego nos pedimos gazpacho de marisco y fideua de fideos finos. Acompañándolo todo con un cava.
De postre, nos tomamos un helado de vainilla con chocolate, y babarois de naranja.
De los mejores mariscos que he tomado en Valencia. Volveremos siempre que queramos premiarnos.
La relacion calidad-precio, no la comento porque comiendo marisco sabemos que se dispara.Eramos 4 personas y nos costo 240 euros

De primero una fuente de marisco hervido de una calidad suprema, cigalas de buen tamaño, quisquilla, gamba rallada exquisita. Quizás sólo el percebe flojeaba por su pequeño tamaño aunque al menos no era el largo y fino procedente de Marruecos que no está ni de lejos tan sombroso como el gallego. Seguimos con unas gambas a la plancha alucinantes, sólo por el sabor de la cabeza merecía la pena la comida.
De segunda una “fideua” de marisco con fideo fino perfecta, en su justo punto. Tomamos un poco de queso para terminar con el vino (un albariño cuyo nombre no recuerdo y Mestizaje) y un surtido de fruta+dulce (este último muy flojo). Cerramos con Macallan y Cardhu reserva especial.
Y por confirmar el comentario anterior, en todo lo que no es comida debería mejorar. Servicio de vino inexistente, mesas muy juntas, local ruidoso y una aceleración del personal muy alta (eso sí con simpatía). En resumen, totalmente recomendable por la calidad de su marisco, sin duda el mejor de Valencia. Además como me invitaron, de precio tampoco estuvo nada mal.

Nueva visita a la para mi mejor marisqueria de Valencia de largo, superior a los Civera, Ramon, Vicente, etc..., esto es, a las marisquerias ""puras". Cierto que las mesas estan pegadas y que el servicio (especialmente Arancha) es un poco "arrabalero", que la carta de vinos es muyyy corta y que los postres flojean, pero la comida, que es lo central, es soberbia. Fuente de marisco cocido tremenda (cigala enorme, gamba rallada brutal, quisquilla y percebe fantasticos), gambas a la plancha de buen tamaño e inmejorables, y despues gazpacho marinero superior. Un par de manzanillas y sendos Gin-Tonis situan la cuenta en 180 euros. Caro, pero el genero lo merece. Quiza si fueran mas "profesionales" serian mas pijos y, en consecuencia, perderian el encanto.

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