estuvimos hace dos semanas mi mujer y mis hijos. hacia tiempo que no comiamos tan bien y en tan agradable sitio. El cordero estaba delicioso, la ensalada regu, pero los postres exquisitos, Por cierto tomamos el vino de la casa que nos recomendaron y he de decir que el precio en relacion con la calidad estupendo. Volveremos a ir dentro de poco la proxima vez pediremos cochinillo que nos han dicho esta tambien muy rico. Yo os recomiendo el lugar. Animo y a disfrutar de la comida.

Parece que hoy si podré realizar mi comentario, pues bien como ayer conteste a los dos comentarios que habian en este restaurante, y aunque sean de hace cuatro y tres años, creo que es interesante decir que la comida fué fenomenal, mi esposa y yo comimos en un entorno agradable, y sin demasiados ruidos, depende de los crios que hayan en ese momento claro.
El vino que tomamos fue un Muga se sirvió a una temperatura de 18º según nos dijeron y por su sabor y como nos lo sirvieron en unas copas grandes estaba muy bueno. He de decir que el vino lo descorcharon delante de nosotros y por lo que me fije igual en las demás mesas, asi que con todos mi respeto hacia los otros dos comentarios es como si no hubieramos estado en el mismo sitio.
Por cierto pedir la quesada que preparan allí es única.
Ya me contareis.

Decepcion. Fuimos recomendados, esperando encontrar uno de los mejores asadores de cordero y la comida pasó sin pena ni gloria. Las corquetas buenas, morcilla bastante aceptable. Respecto al cordero pasó desapercibido. Nos sacaron 2 cuartos para 7 y cuando vimos que era claramente insuficiente nos dijeron que no tenían más. Estaba algo seco, y quizá recalentado (ni siquirea para darle otra oportunidad). El único postre casero era la quesada bastante aceptable.

El servicio del vino pobre. No abren las botellas delante del cliente. Espero mejor suerte a los que prueben este restaurante. 35 euros/persona

Solo la calidad del cordero asado o la de las mollejas hace soportable el infame servicio del vino al que nos sometieron. Botellas calientes, descapsuladas por completo y descorchadas Dios sabe donde, ya que las dos que pedimos llegaron abiertas. Mejor no comento la cara de la camarera que nos atendio cuando le pedimos copas en condiciones.