Buenos arroces en un buen sitio
Es un chiringuito de playa sin ningún glamour (esteticamente muy parecido a varios otros que están en la misma zona) donde se puede comer un buen arroz en una terraza amplia a orillas de mar.
Aquí he probado: el arroz del senyoret, el arroz negro, y el arroz meloso de bogavante, y esta última vez el arroz de cangrejo (tambien meloso). Prefiero los arroces secos, salen en su punto y con mucho sabor. Los precios de los mismos no está nada mal, oscilando entre, si no recuerdo mal, 11-18€ por persona segun el tipo.
Los entrantes, un pelín caros pero siempre nos han parecido muy buenos, de alta calidad, sobre todo las tellinas y los calamares que pedimos siempre que vamos.
Servicio de vino muy rudimentario, precios normales (ni caros ni baratos) y una carta muy muy normalita, casi sin references interesantes. Por lo menos si pides un rosado (suelo quedarme en lambrusco o sangría aquí) te lo sirven frio y con cubitera.
El servicio en sí tampoco sobresale, es eficiente, pero el trato nunca lo llamaría ni calido ni diría que evidencian ganas de agradar.
Es lo que es, un sitio sin lujos donde comer un arroz mas que decente en la playa. A mí personalmente me gusta mucho.