Mi despedida de La Caleta

A principios de enero se publicó en la prensa local la noticia del cierre del restorán a finales de junio. El motivo el cambio de actividad, después de explotar durante la pandemia la venta de sus productos -especialmente su alabada tarde de queso Payoyo-sobre todo a unos conocidos grandes almacenes, han decidido focalizarse en ese aspecto y cerrar. Para mí es una mala noticia, porque empobrece un poco más el panorama gastronómico de la ciudad, no sobrado precisamente de locales de calidad. Se pierde un lugar de referencia, abierto desde 1985, donde he comido y cenado muchas veces y es, en mi opinión, el restaurante más bonito de Tarragona. 

Así pues decidimos con unos amigos despedirnos de La Caleta; nos costó un poco reservar porque los fines de semana los tiene ya prácticamente al completo.

Menaje y espacio entre mesas espléndido. Con las bebidas del aperitivo unas olivas arbequinas y una sopita de cangrejo.

Compartimos como entrantes unas excelentes croquetas de cocido, flores de calabacín rellenas de brandada de bacalo, anchoas sobre tostadas con mantequilla (personalmente prefiero el aceite de oliva con este producto) y espárragos de Navarra con vinagreta.

Como segundos mi mujer y yo optamos por un crujiente de cordero con salsa de yogur muy rico, otro comensal por bacalao confitado con samfaina y la otra rodaballo con samfaina y parmentier de patata. Las 3 opiciones bien elaboradas, presentadas y sabrosas.

De postre Mouse de chocolate nergro, helado de mascarpone con salsa de fresas y -mi preferencia de siempre- helado de ciruelas al Armagnac.

La carta de vinos más reducida que en mi última visita, correcta en precios y calidad pero sin referencia de añadas. Servicio muy bueno.

Pan de 1 tipo con algunas barritas, mejorable.

En fin, contando que llegué a Tarragona en 1987 y habían abierto un par de años antes, pues me da pena que echen el cierre, además cuando estaban en un buen momento culinario. Fueron innovadores en bastantes aspectos.- las virutas de foie-gras, las catas de aceites- y eran referencia para muchísímos tarraconenses, que cuando querían celebrar una fecha especial sabían que en La Caleta estarían bien. No me queda más que desearles suerte en su nueva etapa, y si alguien desea venir que se dé prisa.